después de Bozoum, en vivo desde Bangassou: Algo verdaderamente peligroso: la oración de los pobres.

domingo, 7 de febrero de 2021

Algo verdaderamente peligroso: la oración de los pobres.

Algo verdaderamente peligroso: la oración de los pobres.

La situación de Centro África sigue siendo muy tensa y peligrosa. Gran parte del país está ocupado por milicias rebeldes, de diversa clase, pero bastante coordinadas y decididas a obtener algo. Qué sea lo que quieren, no se entiende bien.

Mientras tanto han conseguido bloquear gran parte del país, y TODO el flujo de mercancías que de la frontera con el Camerún suministra a la capital. Bangui. Las diversas fierezas armadas (centroafricanas, rusas y ruandesas) intentan despejar la carretera, pero es una empresa difícil.

Aquí en Baoro, justamente por delante de la Misión, pasa la carretera asfaltada: desde el 22 de diciembre hasta hoy, 4 de febrero. NINGÚN camión con mercancías ha pasado en dirección de Bangui. En la capital los precios de las mercancías importantes (casi todas ) está subiendo velozmente, llevando a muchas familias al hambre y a la desesperación.

Para esto precisamente hemos vivido, el domingo por la tarde, un bonito momento de oración y de paz, en la rotonda de Baoro. A pesar de no haberlo anunciado antes, un buen número de personas (más de 2.000) se reunió alrededor de este espacio, y con mucha serenidad y en un silencio profundo nos hemos dejado guiar en la oración por un pastor protestante, seguido de un imán musulmán, y finalmente por el párroco católico, P. Esteban. Ha sido hermoso, muy hermoso ver gentes distintas, de fe y orígenes diversos, rezar juntas. Al fin, pedí a cada uno que tomase la mano del vecino y alzarlas juntas hacia el cielo, como oración. y Han sido minutos de oración intensa y profunda.

Como al principio, también al fin la coral animó a los presentes: protestantes, católicos y musulmanes, han cantado y bailado juntos.

Dos mil personas que rezan son muy peligrosas, más que los rebeldes y los distintos bandidos. Pueden conseguir vences a Dios y a la humanidad.

Esta semana he ido dos veces a Bouar, para seguir la situación de los refugiados, que son ya más de 15.000.

Gracias a Dios, padres, sacerdotes, hermanas y fieles están trabajando muy bien, para intentar ir en ayuda de todos los que han dejado la casa por miedo de las violencias de los rebeldes.

Muchos están trabajando duro, para poder ayudar e intervenir mejor: muchas gracias a algunos organismos (MSF, Unicef, ACF, Unicef, WFP, APAD, ANEA) que ayudan con comida, agua y las necesidades más urgentes. Pero gracias también a muchos que, de un modo u otro, nos están ayudando: Siriri, OPS de Praga, Caritas Internacional, CRS. Y amigos y diversos hermanos y hermanas.

También la caridad es muy peligrosa. Puede hacer vencer al Amor.