Silencio…

 

 

p.Cipriano ora
P.Cipriano aujourd'hui

 

Silencio…

Excusad el silencio, pero desde el domingo 6 de junio hemos estado sin teléfono y sin conexión. De modo imprevisto las dos redes telefónicas de Baoro se apagaron. Una de elllas (Orange) aún no se ha restablecido. Por desgracia es la red más difundida, y a través de la que podemos tener las conexión con internet.

Son ya diez días en los que todo está apagado. Esperamos que dentro de algunos días, o algunas semanas... se restablezca la red.

Mientras tanto, esperemos que se arregle. La vida sigue.

El sábado y el domingo 6 de junio fui a Bocaranga por una ocasión especial. El P. Cipriano Vigo, capuchino, festejaba 61 años de misionero en Centro África. Llegó aquí en 1960, cuando nacía Centro África, con la independencia recién lograda. Ha trabajado mucho, y aún continúa trabajando.

El viaje (210 km desde Baoro) fue bien. Pero la tensión sigue siendo alta. En un punto también era señalada una mina... Pero la alegría de estar cerca de un hermano hace olvidar muchas cosas.

En este fin de semana me he dedicado a los poblados más alejados. Salía el jueves por la mañana y volvía el domingo por la tarde. Me he dedicado sobre todo a la preparación de los bautismo en los poblados de Yoro, Bayanga Didi y Sinaforo. Pero también ha habido tiempo para reparar un bomba, visitar asesorar a algún enfermo, y todo en carreteras bastante intransitables.

El domingo por la mañana salí hacia las 6'30 de Yoro para Sinaforo (una buena media hora, para siete kilómetros). Aquí la pequeña iglesia es un tejado cubierto de algunas chapas (hechas con bidones de gasolina). Justamente cuando estaba para empezar la misa, comenzó la lluvia. Afortunadamente, en la capilla, llovía poco.

Perop fue una liturgia muy bonita. Hemos celebrado nueve bautismos, dos primeras comuniones y un matrimonio. A pesar de la lluvia, hubo mucha fiesta en la cabaña.

Luego volví hacia la 13 horas y temía no poder llegar, precisamente por las condiciones de la carretera.

A las 15 horas estaba finalmente en Baoro.

Donde el silencio de la prensa sigue, y seguirá aún por algunos días (o algunas semanas).

P.Cipriano en 1960
P.Cipriano en 1960

Bayanga Didi

Sinaforo

 

 

Construir

 

 

 

Construir

Comienza, al menos para mí, la estación de los bautismos y de los sacramentos..

El camino para llegar a ser cristiano es fruto de un Encuentro. El encuentro con Dios, el encuentro con Jesucristo. Convertirse en cristiano no es (solo) vivir según ciertas reglas. No es ni siquiera (solo) creer en Dios. Ni siquiera es (solo) amar a los otros. Giacomo Biffi, gran obispo de Bolonia, escribía que  "incluso antes que una religión, una moral, un culto, una filosofía, es un ACONTECIMIENTO: el acontecimiento de la Resurrección de Jesucristo de Nazaret, que se convierte en principio de la renovación de los hombres y de las cosas. Por ello es atemporal: las doctrinas nacen, hacen fortuna, encantan durante decenios y tal vez durante siglos, luego decaen y mueren. El hecho cristiano permanece, precisamente porque es un hecho".

Aquí en Centro África el camino para recibir el bautismo es bastante largo. Por lo general, son 3 o 4 años de preparación. Preparación confiada a los catequistas, quienes en los poblados son el corazón de la comunidad cristiana.

Y después la conformación (ahora estamos preparando diversos sacramentos (bautismo y primeras comuniones). Habiendo ya realizado los exámenes de catecismo, el domingo 30 de mayo, marché a Igwe, el poblado más pequeño. A pesar de tener una capilla de paja, y a pesar de las limitaciones del catequista, todo estaba preparado. Los cristianos han cortado la hierba de alrededor de la iglesia, han colocado una lona en el tejado de la capilla, en caso de que llueva. Y, sobre todo, estaban preparados los ocho, entre chicos y chicas que recibieron el bautismo, y los dos niños de la primera comunión. Gran fiesta, pero sobre todo, mucha alegría por un don tan grande, y por la bendición de estar ya en la Iglesia.

El lunes por la mañana marché a Bangui, de donde volví hoy, jueves. Muchas reuniones, y mucho trabajo para preparar la obra del nuevo convento del Carmel. Hemos arreglado las máquinas que nos permitirán fabricar en el mismo sitio, los más de 200.000 ladrillos necesarios para la construcción del convento. Los ladrillos se construyen con una parte de tierra, otra parte arena y un poco de cemento, y son prensados con maquinaria especial. Estamos esperando el cemento, que debería llegar por el río, desde el Congo. Lo necesitamos, solo para los ladrillos precisamos más de 4.500 sacos.

¡Ánimo! 

L'orchestra
La Chorale

I nuovi battezzati
Les nouveaux baptisés

Scuola di Agricultura "Carmel" a Bangui
L'école d'Agriculture "Carmel" à Bangui

Fabbricazione dei mattoni a Bangui
La production de blocs à Bangui