Misión en compañía
En los evangelios. Jesús envía a sus discípulos "de dos en dos", para que preparen el corazón de la gente a su llegada. Un Padre de la Iglesia comenta esta elección, diciendo que Jesús quería que la comunión y la fraternidad sean el primer testimonio de su Reino.
Y en estos días ha sucedido precisamente así.
El jueves por la mañana, 29 de diciembre, marché con el P. Ciriaco, hermano de hábito centroafricano y fray Igor, francés, y nos dirigimos hacia los poblados más alejados. Después de casi tres horas de coche llegamos a Son aforo, a 80 kilómetros de Baro.
Estuvimos esperando la vuelta del catequistas (que había confundido la fecha), y celebramos la Eucaristía en la cabaña que hace de iglesita.
Al término de la misa, regalamos un balón, que desencadena la fiesta y los cursos en el poblado, asustando a cabras y gallinas.
Bajamos a Yoro, donde pasaríamos la noche. Por la tarde fuimos hacia el río, Nana, que está a pocos kilómetros. Y aquí encontramos cinco contenedores, una gran excavadora y una gran barcaza que servía para dragar el río: es lo que queda de la acampada de los chinos, que hace tres años habían comenzado a buscar oro (un poco como en Boom). ¡También aquí!
El 30 de diciembre la Iglesia celebra la fiesta de la Sagrada Familia, a quien está dedicada la capilla de Yoro.. Aquí, el viernes por la mañana celebramos la misa, una misa solemne, con la gracia de Bautismo que el P. Ciriaco administró a 16 niños pequeños del poblado.
Por la tarde, nos cambiamos a Baynada Didi, a pocos kilómetros. Aquí fray Igor pudo gustar por primera vez la serpiente, que el catequista había preparado. También aquí, como el día anterior en Yoro, proyecté un bonito film sobre la Navidad.
El sábado 31 de diciembre celebramos la misa por la mañana. y un bautismo. Y por la tarde volvimos a Baoro.
Y el último día del año. más el cansancio de estos tres días me lleva a la camo pronto: de cualquier modo el año comienza, y rezo y deseo qu también este año sea u año de Gracia para toda la humanidad.
Nada más llegar, recibía la noticia de la muere del papa Benedicto XVI: un grandísimo hombre de fe, un teólogo profundo y sencillo, que quería mucho a África. En 2001, de retorno de Benín, había dicho: "A pesar de los sufrimientos y la pobreza, en África hay una alegría de vivir. Es la alegría de ser una creatura humana: ser hombre y ser amado de Dios".
El lunes por la mañana marché pronoto para Bangui: la obra del nuevo convento, aunque despacio, sigue y participio en las reuniones semanales.
También aquí encuentro la alegría de la fraternidad: además de la comunidad, hay hermanos de hábito recién llegados de Italia: el Provincial, los PP. Saverio, Andrea Bello y fray Matteo Colzani. Con ellos hay también una dotora, Natalina.
Con ellos vuelvo de Bangui el miércoles por la mañana hacia Baoro.
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| Un pallone, ed è festa! Un ballon, et la fete commence! |
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| Sinaforo |
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| Ex cantiere cinese per la ricerca dell'oro Ancien chantier chinois pour l'exploitation de l'or |
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| Yoro |
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| P.Cyriaque |
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| Bayanga Didi |
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| Cantiere del nuovo convento di Bangui Chantier du nouveau couvent de bangui |
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| P.Arland, p.Federico e p.Saverio |
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