Luces y sombras
Después de Pascua, hay un periodo de tiempo muy intenso para el trabajo pastoral. Dentro de algunos días vendrá el obispo para administrar las confirmaciones, y después comenzaremos a celebrar los bautizos y la primeras comuniones en cada poblado.
El sábado por la mañana, 30 de abril, marché pronto para Yoro, donde llegué hacia las 9. Aquí se han reunido chicos, chicas y adultos que se preparan para la confirmación de los poblados de Yoro, Sinaforo, Igwe y Bayanga Didi. Y es el momento de los exámenes: uno por unos, les interrogamos para ver si están dispuestos más o menos para este sacramento, que es el de la "madurez cristiana".
Terminamos hacia las 15, y marché al poblado vecino de Bayanga Didi, también para ver el puente que hemos reparado en los días anteriores.
Pasé la noche en Yoro, y el domingo por la mañana, hacia las 7'15, salí para Igwe, a menos de 20 kilómetros. Pero llegué después de las 9: la carretera, es, en realidad un camino en el bosque. Y encontramos algunos árboles caídos. Logro rodear a un par de ellos, pero el último me obliga a salir fuera de la oscuridad (que hay siempre en el coche) y cortarlo. Poe fortuna pasó una moto, y me echaron una mano.
En Igwe, el poblado más pequeño, hago los exámenes, y estando para acabar, llega un buen temporal. Esperamos que deje de llover, y celebré la misa en la pequeña capilla, intentando preparar el altar poniendo las cosas donde no llueve mucho.
Vuelvo a Baoro por la tarde, y el lunes por la mañana salí para Bangui.
La carretera siempre es mala, especialmente entre aquí y Bossembele (alrededor de 240 kilómetros). Los llamados trabajos no está yendo bien, y lo poco que han hecho es muy deficiente. En el tramo peor (de Bossemptele hasta los 15 kilómetros después de Yaloke – unos 80 kilómetros) nos llevan casi dos horas.
En Bangui pasé a ver los trabajos del nuevo convento, que siguen, aunque un poco lentamente.
El país está experimentando un periodo muy duro: las provisiones de muchas cosas, que llegan en gran parte del vecino Camerún, está casi bloqueadas. Además, a causa de la situación mundial y de la presencia de los mercenarios rusos, la comunidad internacional ha cortado gran parte de las financiación (que también servían para pagar a los maestros, enfermeros y funcionarios estatales).
¿El resultado? Aumento de los precios del cemento, del hierro, del carburante, de la harina, del aceite... Y la escasez del carburante: quería llenar el coche, pero es prácticamente imposible: las pocas estaciones que tienen todavía carburante, están tomadas por cientos de motos y decenas de autobuses y de coches.
La situación es preocupante, y temo que durará por muchos meses.
Bayanga Didi |
Strade... Routes... |
Igwe |
Asfaltatura... a dosi omeopatiche Goudron... oméopathique |
In coda per il carburante En attendant le carburant |
Il cantiere di Bangui Le chantier à Bangui |
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