Octubre
Para nosotros carmelitas, el mes de octubre es muy rico. Además de
estar dedicado a María y al rosario, octubre se abre con la fiesta de Santa
Teresa de Lisieux y sigue, el q5, con la fiesta de Santa Teresa de Jesús, a la
que llamamos Nuestra Madre (porque ella es la que reformó y fundó el Carmelo).
En Bozoum una de las tres capillas del sector está dedicada a Santa
Teresa, y el fin de la semana pasada estuvo señalado por algunos días de
reflexión y preparación. Y el domingo celebramos la fiesta precisamente en esta
capilla. Fue la ocasión de rezar y considerar a Teresa como guía para nuestra
vida cristiana.
Al terminar la mañana marché para Bangui. La carretera está cada día
peor. Para los primeros 80 kilómetros se gastan tres horas. Los trabajos
comenzados desde hace un mes y medio no siguen: solo 10 kilómetros están más o
menos arreglados, pero sin compactar o añadir material.
El lunes fue el día de la fiesta litúrgica de Santa Teresa, que celebré
con la comunidad del Carmelo de Bangui. Santa Teresa fundó muchos monasterios,
y todas las veces que abría un nuevo monasterio era feliz de ofrecer a Dios una
casa que tanto frailes como monjas llenarían de oración y de vida fraterna.
De martes a jueves me quedé en Banguí para trabajar con la Cáritas de
las otras diócesis, y reflexionar sobre el trabajo hecho y el que hay que
hacer. Hay algunos obispos, sacerdotes, hermanas y laicos, comprometidos en ser
"Las manos del corazón de la Iglesia", como decía Pablo VI.
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