¡En la República Centroafricana los deseos de feliz año nuevo duran al menos tres meses! Comienza alrededor de Navidad y continúa hasta marzo. Afortunadamente, ¡se acerca la Semana Santa, para variar!
Después de Navidad y de los días pasados en los pueblos, tuve unos días relativamente tranquilos. El domingo 31 de diciembre me dirijo a Dobere, 50 km de carretera semiasfaltada. Aquí la capilla está dedicada a San Esteban, que hoy celebramos con la Sagrada Familia.
El 31 de diciembre solemos organizar una vigilia de oración por la noche. Pero este año no ha sido posible organizarlo porque temíamos la intervención de los mercenarios rusos de Wagner, que imponen el toque de queda desde hace varios días y que, a partir de las 19 horas, recorren el pueblo, despiden a la gente y arrestan a toda persona sospechosa...
Así que decidimos adelantar la oración para las 5 p.m., para que la gente pueda regresar a casa sana y salva. Fue un tiempo de oración, acción de gracias y súplica por un nuevo año en este mundo tenso y asolado por la crisis.
El lunes 1 de enero por la mañana salgo hacia Bangui. Toda la semana trabajo en la obra del nuevo convento, para completar la instalación eléctrica.
Entonces, ¡feliz año nuevo! ¡Feliz año!
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| Dobere |
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