Refugiados
y desplazados, casas y escuelas
Una vez terminada la reunión de Cáritas en Bangui, salí de la capital
al sábado por la mañana a las 5 horas, con el vicario de la diócesis, el
sacerdote Mirek.
Me detuve en Baoro, donde encontré a la comunidad, y especialmente
saludé al P. Lionello que en los próximos días vuelve definitivamente (por el
momento) para Italia, después de haber estado trabajando en la misión durante
cinco años.
Por la tarde seguí para Bouar, para llegar posteriormente a Bozoum por
la tarde-noche, después de casi 600 kilómetros.
El domingo era la gran fiesta de Pentecostés, en la que recordamos el
don del Espíritu Santo, que implicó a los apóstoles y los lanzó a los caminos
del mundo para anunciar a Cristo.
El lunes por la mañana volví a Bouar, para reunirme con la comunidad de
San Elías y Yolé, para comprobar con ellos el trabajo de formación con los
jóvenes.
En estos días las noticias sobre Centro África siguen siendo preocupantes.
Ayer por la tarde un grupo armado irrumpió en Ndim (a 170 kilómetros de
Bozoum), y robaron unas cien vacas lecheras, entre las se encontraban algunas
de la comunidad de las hermanas...
Recibí un mensaje oficial de HCR (Alto Comisariato de Refugiados) del
31 de mayo con estas cifras: 484.028 despojados (técnicamente "refugiados
internos") y 503.600 refugiados de fuera... que hace un total de 987.628
personas, sobre una población de unos cuatro millones. ¡Una cuarta parte de la
población!
Y para acabar, un par de buenas noticias.
Esta semana ha sido el examen del BC (que tiene lugar después de la
enseñanza secundaria superior), y los chicos de nuestro liceo San Agustín han
tenido un resultado óptimo: 24 aprobado sobre 25 candidatos. Y nuestros alumnos
ocupan las 22 primeras posiciones como mejores resultados en el examen.
También terminamos las 14 primeras casas para los pobres, construidas
con la ayuda de Cordaid, la Cáritas de Holanda. Unas vez terminadas estas,
seguiremos con otras 16(18 casas, que permitirán a los ancianos, viudas y
víctimas de la Seleka o de los antibalaka, tener una casa decente.
p.Lionello |
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