Comienza el año
No estamos en el 1º de enero; pero, bajo muchos aspectos, algunas
actividades empiezan precisamente en septiembre.
Y entonces, el domingo pasado, 21 de septiembre, hubo una gran
celebración eucarística por el comienzo del año pastoral: muchos movimientos
presentes con los uniformes, o los foulard de colores. Danzas y cantos de
excepción, y un ofertorio, mejor dicho
dos (el segundo para los pobres y los huérfanos) que me ha impresionado: a
pesar de la pobreza, muchísima gente ha llevado dones, dinero para quien es
menos afortunado.
El segundo acontecimiento de la semana, ha sido el comienzo del AÑO
ESCOLAR en Bozoum. El miércoles 24 de septiembre, han reabierto las escuelas
las puertas y cientos de alumnos han reemprendido el camino de la escuela.
Nuestras escuelas aquí en la Misión (desdel el Asilo al Liceo) acogen
también este año a más de mil cien alumnos.
Pero lo bonito ha sido que también las escuelas estatales han abierto,
aunque con timidez. Y esto es algo excepcional: generalmente las escuelas abren
hacia noviembre-diciembre. Pero gracias a la animación y al apoyo que damos a
los profesores (gracias a la financiación de la República Checa y de UNICEF)
los maestros han aceptado el reto y el miércoles por la mañana estaban en la
escuela para recibir a los niños.
Es una semilla, pero es muy importante que los niños puedan ir a la
escuela normalmente.
Durante la semana se intensifica también la preparación a la fiesta de
la parroquia, dedicada a San Miguel.
Catequesis, confesiones, misa: todo está preparado para celebrar la
protección de Dios sobre la parroquia y la ciudad, que durante este año ha sido
particularmente intensa.
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