Feria
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El fin de semana pasado ha sido intensísimo.
La Feria, acontecimiento en todo el país (y también en los países
vecinos), ha involucrado a toda la ciudad y a la región. El corazón de Bozoum,
en estos tres días, se ha movido hacia el área de la feria. Alrededor de los
cuarentas stands (cada uno ocupado por 3-4 cooperativas) se levantaron
restaurantes y bares, e igualmente los comerciantes pusieron mercadillos. Solo
faltaba el turrón.
Después de la apertura del viernes por la mañana, la venta de los
productos y los intercambios comenzaron. Al principio lentamente y luego, poco
a poco, cada vez con mayor rapidez. El domingo por la tarde no había
prácticamente ningún producto para vender.
El sábado, mientras la Feria continuaba, se dedicó a las visitas.
Aprovechamos la presencia de los funcionarios del Ministerio del Desarrollo
Agrícola para llevarles a visitar, junto con las autoridades, los arrozales y
los huertos.
Por la mañana fuimos a Bohoro, un centro del cultivo de arroz, creado en los años 70 por los chinos, y que ahora es el centro más importante de una red de una docena de arrozales.
Por la mañana fuimos a Bohoro, un centro del cultivo de arroz, creado en los años 70 por los chinos, y que ahora es el centro más importante de una red de una docena de arrozales.
A mediodía, visitamos una parte de los huertos de Bozoum: son
dieciocho, con un total de al menos diez hectáreas, repartidas en algunos
sitios con abundante agua. Cada uno es más bonito que el anterior, una
maravilla de orden, color y variedad.
Muchos han sido creados y administrados por mujeres, para quienes el cultivo representa un buen sistema para enriquecer la mesa y el presupuesto familiar.
Muchos han sido creados y administrados por mujeres, para quienes el cultivo representa un buen sistema para enriquecer la mesa y el presupuesto familiar.
Y el sábado por la tarde fue el momento de recoger las papeletas con
las que los visitantes e invitados apreciaron y evaluaron los stands y los
huertos. Todos los invitados a la misión, checos, italianos y franceses se han implicado. Puse a trabajar
también a Pablo y Cristina, presidente y vicepresidenta de la Asociación
"Amigos para Centro África", que financian la Feria.
El domingo celebramos la misa con el vice secretario de Cáritas
centroafricana, el sacerdote Alain.
Por la tarde fue el momento de los premios. Todo estaba dispuesto. Y
los nombres de los ganadores de los dos concurso, el de los expositores de la
Feria y el de los huertos, se proclamaron. Medalla, diploma, alguna herramienta
para el trabajo, pero sobre todo, mucho orgullo.
Y detrás esto, y más allá de las 180 cooperativas presentes, hay un
trabajo enorme. El personal de Cáritas ha sido impecable, pero gran parte del
trabajo de secretaría, acogida y recolección habían sido prestados por los
alumnos de nuestro liceo San Agustín, que han sido excelentes.
Y de este modo ha terminado la Feria, y el lunes las cooperativas
volverán a casa (algunas han hecho más de 220 kilómetros por carreteras en
pésimo estado). Marchan con una cifra de negocios de 40 millones de f Cfa (unos
61.000 euros), y con mucho orgullo. El orgullo de los aldeanos.
Maman Suzanne, vincittrice del concorso deli ORTI Maman Suzanne, première dans le councours des jardins potagers |
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