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sábado, 25 de febrero de 2017

Un cardenal de visita





Un cardenal de visita
Esta es la sorpresa de la semana: la visita del cardenal, el arzobispo de Bangui, Dieundonné Nzapalainga.
Después de haber sido nombrado cardenal, había prometido una visita en todas las diócesis del país, y ha comenzado precisamente por la nuestra, la diócesis de Bouar.
El miércoles por la mañana salió de la capital y, después de de detenerse en la parroquia (y hospital) de Bossemptele, terminó finalmente en Bozoum hacia las 17 horas. Acudió mucha gente a recibirlo, en la carretera que lleva a la misión. Lo acompañamos entre cantos y gritos de alegría (y algún empujón) hasta la iglesia, donde pudo rezar y dirigir un primer saludo a la gente.
La gente está más que contenta, también porque se trata del único personaje de relieve y referencia en el país.
El jueves por la mañana hubo un programa intenso para que pudiera conocer las diferentes realidades de la parroquia, y seguir camino de la etapa siguiente.
La misa fue a las 6'30 de la mañana: a pesar de la hora, la iglesia estaba abarrotada. Una celebración hermosa, con danzas, cantos, oración, escucha de la Palabra de Dios y de lo que el cardenal nos dijo: una invitación a confiarnos  siempre a Dios, a crecer en la fidelidad a su amor y al amor para con todos los hermanos, sin distinción, y a mirar a lo lejos, para construir con seriedad el futuro del país.
Después de la misa, lo acompañé al Liceo, donde los profesores y los alumnos lo acogieron con alegría y escucharon con atención un mensaje de confianza en los jóvenes, y de responsabilidad de todos para construir un futuro serie y lleno de esperanza, a partir del trabajo honrado y de un estudio serio.
Le acompañamos, asimismo, por las escuelas elementales, y luego el Consejo Parroquial se reunió con él para presentarle las realidades de la parroquia y escuchar sus consejos y su estímulo.
Terminamos con una reunión con los antibalaka, los rebeldes que siembran miedo y preocupación. Le escucharon con atención, aunque sus palabras fueron severas.
Después de saludar a las Hermanas, marchamos hacia Bocaranga, una ciudad a 125 kilómetros, que el 2 de febrero fue atacada por algunas decenas de Peul, que mataron a veintiuna personas, quemaron el mercado y muchos comercios, sembrando el terror durante cuatro larguísimas horas. La gente huyó (llegaron incluso a Bozoum). Y todo esto sucedió, a pesar de un contingente de Cascos Azules, que no intervino y dejó hacer...
A lo largo de la carretera muchos poblados esperaban al cardenal. Yo marché rápidamente para precederlo, avisar a los poblados, y eventualmente indicar si había problemas de seguridad...
Nos detuvimos en Tolle, a 60 kilómetros de Bozoum, donde el cardenal hizo una parada para saludar  y tener un momento de oración con la gente. Yo seguí adelante, y a las 15 horas estaba en Bocaranga. Aquí había muchísima gente esperándolo: es prácticamente el primer momento de fiesta y tranquilidad para la gente de la ciudad ( y los miles de refugiados). La acogida fue triunfal, y en un jolgorio de cantos, gritos y polvo lo acompañamos a la iglesia.
Después de descansar un momento, nos reunimos juntos los misioneras y los misioneros de Bocaranga y las misiones de Ndim y de Ngaundaye. Fue un momento intenso en el que el cardenal expresó todo la gratitud de la Iglesia y de la gente por su presente fidelidad, a pesar de los peligros y de la guerra. Hay aquí hermanas jóvenes y padres de 80 años, algunos de los cuales llevan en Centro África desde 1960.
El viernes por la mañana comenzamos la misa, también aquí muy solemne, a las 6'30 horas: la iglesia estaba llena y muchos tuvieron que quedarse fuera.
Después de la misa, hubo un encuentro con alumnos y profesores, luego otro con la gente de Bocaranga, para terminar con una reunión con los antibalaka. También a ellos, como en Bozoum, les recomendó mirar a lo lejos, y tomar caminos de paz, de reconciliación, de construcción y no de destrucción y muertes...
Hacia las 11.30 el cardenal tomó la carretera de Bouar, al tiempo que yo me quedaba para algunas reuniones con la Cáritas de la parroquia y con algunas cooperativas agrícolas, para ver cómo ayudar a la ciudad y a los miles de huidos hay allí que están refugiados... Las necesidades son enormes.
Y es triste ver el abandono por parte del Estado de gran parte del territorio. Aquí el Gobierno parece tener solo derechos y ningún deber: las carreteras están infames, las escuelas y los hospitales están dejados a la buena voluntad de las parroquias, ONG y a gente de buena voluntad; las fuerzas del orden están ausentes y son impotentes. A lo cual se suma la gran misión que tiene la ONU que, a pesar de un despliegue impresionante de personas y medios, parece no tener una precisa voluntad de pacificación.
Este simple hecho es emblemático, al que asistí esta semana. Durante el encuentro con los alumnos y estudiantes, una chica de 14-15 años llevó una carta en la que explicaba la situación, destinada al Presidente de la República. Decía textualmente estas palabras: "Se la doy a usted, Eminencia, para que se la entregue al Presidente de la República: porque, si se la doy a otra persona, nunca llegara a sus manos".





Bozoum, Lycée St Augustin


Bozoum, école Bakanjia


Bozoum, école Maternelle


Tolle

Un antibalaka... armato e non disturbato da nessuno!
Un antibalaka, armé...

Bocaranga, riunione con i religiosi e le religiose


Bocaranga, riunione con gli antibalaka

sábado, 18 de febrero de 2017

Entre Bouar y Bozoum





 



Entre Bouar y Bozoum
El viernes por la tarde volví a Centro África, después del viaje hecho a Camerún. Me detuve en Bozoum, donde pude asistir a la apertura de la Feria Agrícola, que Cáritas organiza ya desde hace siete años, gracias al trabajo del P. Benjamín Gusmeroli.
El sábado por la tarde marché con el P. Enrique por la carretera directa; llegamos por fin por la tarde noche a Bozoum.
Durante estos días he estado haciendo algunos trabajos en la iglesia. He instalado cinco ventiladores, para mejorar un poco la parte antigua de la iglesia, que es muy calurosa en esta estación del año.
Enrique Massone, por su parte, ha comenzado a  alicatar el presbiterio- Gracias al amigo César Biancini (y su familia) nos han llegado los azulejos que nos permitirán tener un ambiente más limpio y más digno.
Es un trabajo largo y cansado, pero Enrique Massone está acostumbrado: precisamente este año celebra  treinta años de trabajos en Centro África, donde viene regularmente por uno o dos meses todos los años, desde 1987.
Y la próxima semana.... habrá una sorpresa. 














 

sábado, 11 de febrero de 2017

Camerún 2017



Camerún 2017
Acabo de llegar a Bouar, después de algo más de 2.000 kilómetros recorridos para ir a Yaundé, capital de Camerún.
La semana ha estado, como siempre, muy animada.
El domingo terminamos la Feria Agrícola de Bozoum. Los resultados, a pesar de la inseguridad y de que no han venido a participar muchas cooperativas, han sido buenos (con un volumen de negocio entre 22.000 y 30.000 euros).
Por la tarde del domingo entregamos los premios a los mejores expositores y a los mejores huertos...
El lunes por la mañana comenzamos una "Semana cultural" en nuestro Liceo San Agustín. Se trata de una semana llena de iniciativas culturales (proyecciones de películas, debates, conferencias, danzas, concursos, etc.) preparada por los alumnos, junto con los profesores y con la dirección de sor Anita.
Por la mañana, el fin de semana, salí con prisas al aeropuerto de Bozoum y marché en un avión pequeño de las Naciones Unidas, que en una hora me llevó a Bangui, donde tuve algunas reuniones sobre futuros proyectos de construcción.
El martes me desperté a las 4'30 y, después de celebrar la misa, salimos el P. Federico y yo hacia Camerún. Que precisamente no se encuentra al lado. A las 12'30 estábamos en Bouar y, por la tarde, después de haber recogido al P. Enrique continuamos hacia la frontera. El pasaje siempre es incierto: a veces es suficiente una hora, otras veces dura de tres a cuatros horas... Hemos tenido bastante suerte y, después de "solo" una hora y media volvemos a tomar la carretera y a las 19'30 estábamos en Bertoua, donde pasamos la noche. Aquí volvimos a encontrar a algunos amigos centroafricanos, que tuvieron que huir del país en 2014, y que intentan reconstruir una actividad comercial. Volvimos a salir el miércoles por la mañana y a mediodía nos encontrábamos ya en Yaundé, a 1.200 kilómetros de Bangui.
Estamos aquí para reunirnos con los padres y nuestros jóvenes en formación, pero también para hacer algunas compras (semillas, medicinas, pegamento para madera...). Aprovechamos asimismo el poco tiempo que teníamos para pasar a saludar al Embajador de Italia en Camerún, que había ido en octubre a Bozoum.
El viernes por la mañana a las 5'45 volvimos para Yaundé y por la tarde llegábamos a Bouar.
Por la carretera encontramos un pequeño grupo de rebeldes, que estaban estacionados en el allí desde hace meses, sin que hayan sido perturbados por las fuerzas del orden o por los Cascos Azules...
En Bouar la situación es bastante tensa, pues hay miedo de ataques y de combates... En la noche del jueves al viernes hubo una huida general, debido a las muchos "rumores" que circulaban...
Suzanne, la vincitrice del concorso degli orti
Suzanne, le lauréat du concours des jardins potagers





Bozoum

La comunità dei Carmelitani a Yaounde

Acquisto di sementi
Achat de semences à Yaounde



Forno a legna a Bertoua
le four à bois à Bertoua


sábado, 4 de febrero de 2017

Feria agrícola de 2017






Feria agrícola de 2017
Y a la vista de todo y de todos... también este año hemos logrado organizar la gran Feria Agrícola de Bozoum.
La creamos en 2004 y hoy es la décimo tercera edición. Una Feria para impulsar a los agricultores y a las cooperativas. Es la Feria del orgullo de los agricultores.
Desde hace años creo y creemos que no puede haber paz sin desarrollo, y seguimos impulsando los esfuerzos de muchas mujeres y de muchos hombres de buena voluntad, convencidos de que solo con el trabajo, la paciencia y la pasión es como se puede construir la dignidad de una persona.
Desgraciadamente, la edición de 2017 nace en un momento difícil, Precisamente, la víspera, viernes 2 de febrero, una banda de rebeldes atacaron la ciudad de Bocaranga (a 125 km) , quemando casas y mercado, saqueando y matando al menos a dieciocho personas...
Debido a la inseguridad no hemos podido invitar  a las cooperativas de las zonas de Bocaranga, Koui, Ndim, Ngaundaye y Paoua… Lo cual ha reducido mucho la presencia de los expositores y el volumen de las artículos expuestos y vendidos...
Además de esto, no hemos recibido ninguna ayuda ni financiación de las diversas ONG, al contrario de los años pasados. Pero la providencia es grande, y  también lo hemos conseguido con pocos medios.
La Feria venimos preparándola desde hace un mes. No faltan voluntarios, el personal y los alumnos de la última clase de nuestro Liceo San Agustín, que con valor y disponibilidad acogen, registran y siguen las actividades.
De cualquier modo, el sábado por la mañana todos estábamos dispuestos. El espacio está limpio, los stands preparados, y a las 9.00 comenzamos con un pequeño desfile. Serán entonces los discursos de las autoridades, pero desde hace meses no hay ni Prefecto, ni vice prefecto en Bozoum...
La Feria es un espacio de exposición (para poner en evidencia el rostro más bello de la agricultura) y de la venta.
Por la tarde fuimos a visitar una decena de huertos... También aquí, un espectáculo para los ojos y para el corazón. Gente sencilla, que trabaja duramente y con orgullo presenta el fruto de su propio trabajo.
Muy bello.


gli alunni del nostro Liceo
les élèves de notre Lycée St Augustin